El Ibex 35 continúa su ascenso imparable y consigue, así, recuperar los 10.000 puntos por primera vez desde julio de 2011, tras apuntarse un alza del 3,45% en las últimas cinco sesiones -suma ya un 22,46% en el año-. Lo cierto es que ayer tuvo este nivel a tiro de piedra desde primera hora de la mañana, pero fue la apertura alcista de Wall Street la que le dio el impulso necesario para cerrar por encima de este nivel, concretamente en los 10.001,80 puntos.Y es que en una semana llena de noticias positivas, el PIB de China vino a dar el campanazo para prolongar el rally alcista a la que es su séptima semana de subidas. El crecimiento económico del gigante asiático se aceleró hasta el 7,8% en el tercer trimestre del año, lo que significa su primer repunte en un año. Este optimismo se sumó al de Wall Street, que celebraba esta semana el deseado acuerdo entre republicanos y demócratas para limitar el techo de deuda, ya que desde el pasado 1 de octubre la falta de acuerdo entre ambos llevó a la primera economía del mundo a suspender los gastos públicos no urgentes por primera vez desde la era Clinton. Sin embargo, la incertidumbre ante la decisión se saldó el miércoles con otro parche para prorrogar el cierre público hasta el 15 de enero y permitir al Tesoro emitir deuda hasta el 7 de febrero. Así, se anuló la posibilidad de un default, es decir, de una suspensión de pagos total de la primera economía del mundo, que vino como agua de mayo para dar otro empujoncito a la renta variable.
A este respecto, Javier Urones, analista de XTB, comenta que "comenzábamos la semana con una leve recogida de beneficios en un movimiento meramente técnico en los mercados y ya desde mediados de semana, momento en el cual se ratificaba el acuerdo entre demócratas y republicanos, los índices de medio mundo tomaron fuerzas para romper resistencias".
De esta forma, el Ibex 35 cruzó por cuadragésima vez la barrera psicológica de los 10.000 puntos, que logró batir por primera vez en el año 1998. Y con ésta logra su mejor racha desde el año 2006. El escenario es más que alentador, ya que el 70% de los expertos cree que todavía queda gasolina alcista y espera que el selectivo consolide este nivel antes de que finalice el año. "La gran revalorización del Ibex se debe, fundamentalmente, a la mejora de las perspectivas macroeconómicas y a la menor percepción de riesgo por parte de los inversores -sobre todo extranjeros- de los activos españoles. Mientras esto no cambie, no hay resistencias importantes hasta pasados los 10.400 puntos, con lo que el rally podría continuar", explica Diego Jiménez-Albarracín, responsable de renta variable del centro de inversiones de Deutsche Bank.
Y es que el dinero está volviendo a Europa. La encuesta elaborada por Bank of America Merrill Lynch en el mes de octubre vino a confirmar lo que ya era un secreto a voces para el mercado: no había tantos gestores optimistas con Europa desde antes de la crisis, es decir, el año 2007. Y esto se hace sentir en sus valoraciones, ya que el 46% de los profesionales de la inversión sobrepondera la región de cara a los próximos doce meses -por encima del 36% registrado en la encuesta del mes de septiembre-. Además, otro dato que se desprende de la encuesta es que Europa es la región preferida a nivel global a la hora de invertir por primera vez en seis años.
Cinco elementos han sido clave para hacer que la bolsa española continuara la senda alcista hasta este nivel. El primero de ellos, cuando Mario Draghi anunció la famosa frase de que "el BCE (Banco Central Europeo) está preparado para hacer lo que sea necesario para preservar el euro. Y créanme, será suficiente". Entonces, el Ibex 35 estaba en mínimos anuales en los 5.956 puntos, y desde ahí el selectivo ha subido ya un 68% hasta el nivel actual.
Tan sólo le hizo falta un alza del 0,84% para cruzar los 10.000. Muchos valores quisieron ser protagonistas de la fiesta alcista y precisamente han sido un segundo motor de la subida del índice. Entre ellos, Mapfre o Dia, que repuntaron más de un 7% en la semana.La subida que ha protagonizado la distribuidora de alimentación tiene una celebración especial, ya que le llevó a cotizar en el precio máximo de su historia, en los 6,95 euros. Junto a él, otros valores también han querido hacer historia en un día tan importante. Inditex se revalorizó hasta superar los 118 euros y Amadeus cotizó en los 26,4 euros. En conjunto, las empresas del índice selectivo han ganado en lo que va de ejercicio más de 100.000 millones de capitalización.
Pero el optimismo no se queda en el ámbito bursátil, ya que otro factor que ha reflejado el buen momento que vive la bolsa española es que los inversores han mostrado un aumento de la confianza en el mercado de deuda. De hecho, varias compañías españolas han salido al mercado en busca de financiación y lo han hecho a los costes más bajos este año. Un buen ejemplo serían Red Eléctrica, Repsol y fuera del Ibex, Prosegur.
También se ha notado en la importante reestructuración de la banca española. Además del rescate de Bankia se han producido amplicaciones de capital como las de Popular y Sabadell o la salida a bolsa de Liberbank. Importantes firmas de inversión han mejorado sus valoraciones sobre la banca mediana, y se sitúa como uno de los sectores que más ha subido en los últimos meses. Es más, Bankinter es el segundo valor más alcista del Ibex en el año, y sube más de un 120%.
Y otro aspecto que no hay que olvidar son las operaciones corporativas. Una de las más importantes en los últimos meses ha sido la de Telefónica, que lanzó una oferta por ePlus, la filial alemana de KPN. Esta operación estuvo marcada por la incertidumbre, ya que Carlos Slim, que ya tenía participación en KPN, lanzó una oferta por el cien por cien de la compañía. Eso provocó que Telefónica subiese su oferta por la alemana. Finalmente, el magnate mexicano retiró su oferta. Pero no ha sido la única que hemos visto en los últimos tiempos. A este respecto, otro ejemplo de este tipo de operaciones ha sido la integración de la estadounidense Talecris en Grifols, que alcanzó sus máximos históricos el pasado mes de agosto.
El optimismo no se quedó sólo en España y los principales índices europeos, el EuroStoxx 50, el francés Cac 40, el Dax alemán y el italiano Ftse Mib, también terminaron el viernes en máximos, siendo las subidas en las últimas cinco jornadas entre el 1,5% y un poco más del 2% de manera generalizada.
Y Wall Street no quiso ser menos, por eso, el Nasdaq 100 y el S&P 500 también coronaron máximos, en el caso del segundo han sido históricos al repuntar entre un 2 y un 3% en la semana. El Dow Jones se quedó más rezagado aunque también repuntó en torno al 1%.
En medio de las subidas, Estados Unidos ha estado marcado por la temporada de resultados. Intel, Cola-Cola o Citigroup fueron algunos de los que tuvieron que pasar el examen. El jueves llegó el día de Google, el buscador más famoso que registró unas ganancias en el tercer trimestre del año de 2.970 millones de dólares. Lo que corresponde a un beneficio por acción de 10,74 dólares, por lo que sorprendió positivamente al mercado ya que se esperaban 10,357 dólares por título. Esto le impulsó en la sesión del viernes más de un 13% hasta alcanzar los 1.011 dólares por primera vez en su historia.
Y como nadie quiso perderse el momento, el euro se proclamó vencedor en su cruce contra el billete verde. La moneda única alcanzó durante la semana los 1,368 dólares, un nivel que no veía desde el ejercicio de 2011.
El termómetro de la crisis también se hizo eco de este optimismo, y la prima de riesgo -que mide el diferencial entre la rentabilidad del bono español a diez años con la del bund alemán- cayó hasta los 243 puntos básicos. Hubo compras en el mercado de deuda a ambos lados del Atlántico, y el rendimiento del bono español a diez años cayó hasta el 4,244%. Por su parte, la de su homólogo alemán se situó en el 1,830% y la del T-Note estadounidense en el 2,59%.
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